06/04/2025
Una nueva encuesta realizada por YouGov a casi 20.000 adultos en Estados Unidos reveló un dato contundente: la mayoría de los estadounidenses cree que el consumo regular de alcohol es más perjudicial para la salud que el uso regular de marihuana. Esta percepción marca un cambio importante en la forma en que la sociedad valora estas sustancias, especialmente en el contexto de la legalización del cannabis medicinal y recreativo.
Según los resultados, el 58 % de los encuestados considera que el alcohol es más dañino, frente a solo un 19 % que piensa lo mismo del cannabis. Un 10 % cree que ninguna de las dos es más perjudicial que la otra, y un 13 % no está seguro.
Este cambio en la percepción no se limita a un solo grupo político. Entre los demócratas, el 64 % ve el alcohol como más dañino, seguido por el 59 % de los independientes y el 52 % de los republicanos. A medida que el debate por la regulación del cannabis avanza, la opinión pública parece inclinarse cada vez más hacia una visión más racional y científica del uso del cannabis.
Sin embargo, cuando se les preguntó qué sustancia disfrutan más, las respuestas cambian: el 27 % de los adultos dijo disfrutar más del alcohol, mientras que el 13 % prefirió la marihuana. Un 5 % disfruta ambas por igual, y el grupo más grande, el 48 %, dijo no disfrutar ninguna.
En cuanto al uso frecuente, los datos también mostraron una mayoría que no consume regularmente ninguna de las dos sustancias. Solo el 27 % dijo consumir alcohol más a menudo, mientras que apenas el 11 % señaló usar más cannabis. Otro 4 % usa ambas por igual, y el 52 % indicó que no consume ninguna.
Otras encuestas recientes complementan estos datos con hallazgos aún más reveladores: más de la mitad de los usuarios de cannabis dicen que reducen o eliminan el consumo de alcohol después de usar marihuana. También se ha demostrado que los adultos jóvenes en EE.UU. son casi tres veces más propensos a usar cannabis a diario que alcohol.
Estudios adicionales indican que muchos consumidores están utilizando el cannabis como un sustituto menos riesgoso frente al alcohol, los opioides e incluso sustancias como la metanfetamina. En Canadá, donde el cannabis es legal a nivel federal, se ha observado incluso una baja en las ventas de cerveza tras la legalización, lo que refuerza esta teoría de sustitución.
Todo esto encaja con lo que muchas personas ya intuyen: el cannabis, cuando se usa de forma responsable y con fines terapéuticos, representa una alternativa más segura que el alcohol y otras drogas legales. Incluso encuestas de entidades como Gallup y la Asociación Psiquiátrica Americana muestran que el cannabis es percibido como menos adictivo y menos dañino que el alcohol, el tabaco y los opiáceos.
Desde el Dispensario Jungle Bros, celebramos este avance en la conciencia colectiva. Creemos que la educación, la información científica y el acceso responsable al cannabis medicinal son herramientas clave para mejorar la calidad de vida y reducir el impacto de sustancias más dañinas como el alcohol.
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